Es cierto que hay algunos que tienen más facilidades para el dibujo y hay otros a los que les cuesta más trabajo (y frustraciones) poder dibujar “bien”. Pero creo que algo fundamental para poder desarrollar de mejor manera esta habilidad (además de la práctica), es dejar de lado esa creencia de que hay sólo una manera de “dibujar bien” o que si no soy bueno en el dibujo, mejor no lo intento. Creo que más importante que eso, es darse la oportunidad de reencontrarse con el dibujo y descubrir lo que me ofrece.
¿Y qué me ofrece el dibujo? Hay varios estudios que mencionan que dibujar ayuda a la concentración, trabajar la motricidad fina, etc. Pero ahora, más que hablar de estudios científicos, me gustaría contar un poco de lo que ha sido para mí, reencontrarme con el dibujo (ya que sólo desde hace algunos años comencé a dedicarle tiempo a esta práctica).
Primero que todo, dibujar constantemente ha sido una manera de conocerme a mí misma, ya que he podido identificar lo que me inspira. Cada vez que dibujo sobre algún tema que me parece interesante, se transforma en una experiencia mágica que me permite reflexionar y reconocer la importancia que tiene ese tema para mí. Y esto, hace que automáticamente ese momento de dibujar se llene de sentido y el dibujo parece fluir de mejor manera, al igual que el resultado.
Antes de dedicarme a la ilustración, no había notado lo mucho que amo la naturaleza. Tampoco había notado lo inmensamente hermosa y sorprendente que es. Había estado varias veces en contacto con ella, había visto varios documentales, libros y aprendido algo muy vago en el colegio. Pero no fue hasta que comencé a dibujar plantas y animales, que comencé a observar detenidamente las texturas, formas, colores, expresiones y detalles que hay en cada especie que he intentado representar. Y es ahí, cuando me di cuenta que me sorprende y conmueve la belleza y perfección de las plantas, flores y animales. Dibujar ha sido para mí, una forma de conectarme conmigo misma y grabar en mi memoria algunos nombres y detalles de diferentes especies de nuestra biodiversidad.
Por otro lado, dibujar también me ha permitido desarrollar mi creatividad y mejorar mi autoestima. Me ha significado reconocer que soy capaz de mucho más de lo que pensaba en un comienzo, que ha medida que pasa el tiempo y las horas de práctica, he ido mejorando un montón y además he ido sorprendiéndome de mí misma...lo que ha sido profundamente enriquecedor.
Para mí, dibujar se ha convertido en algo mucho más que mi trabajo. Es la manera que tengo de expresar mi forma de ver el mundo, es mi momento de conexión, es una experiencia que disfruto enormemente y es también muchas veces un desafío, un aprendizaje continuo y el puente para poder comunicarme con otras personas.